Casi todos tememos la llegada de septiembre por el gasto que supone la puesta en marcha de la casa y el curso escolar.
Es el momento de hacer un presupuesto familiar que nos ayude a vivir con realismo y tranquilidad.
Ahorrar es posible y es fácil. La clave está en el control del gasto y en el estudio de los ingresos. Te dejo algunas pautas que sugiero en mi libro el «Manual para organizar tu casa».
Ya conoces mi visión profesional del trabajo doméstico. Para mí es la clave, por eso saco tiempo cada semana para trabajar todo lo que quiero que sea mi hogar durante esa semana sin perderlo de vista ni un segundo. Así evitaremos sobresaltos y riesgos que podrían poner en peligro nuestra estabilidad familiar. ¿Superamos la cuesta de septiembre juntos?
Cosas que tengo en cuenta:
- Recogida de datos para presupuestar. Para eso hace falta dedicar tiempo. Te recomiendo una hoja Excel en la que vas poniendo todos los gastos que recuerdes, rellenando cantidades. Abre tus carpetas con todas las facturas del año. Busca y rebusca.
- Destina un 10% al ahorro.
- Lleva la contabilidad y archívalo todo. Dedícale tiempo mensual y ponlo en tu calendario. Establece un sistema sencillo: en carpetas por apartados y años o el mismo sistema en digital escaneando documentos.
- Ten los bancos al día. Comprueba y controla. Sin pereza ni alergia para analizar las cuentas, al contrario, hay que dominarlas. Persevera.
- No te endeudes.
Ideas para ahorrar en la cuesta de septiembre y siempre:
- Pedir siempre los tiques y archivarlos durante un mes. Haz lo mismo con las facturas, pero éstas guárdalas al menos dos años.
- Limitar el gasto semanal en alimentación. Tener los menús hechos para comer sano y comprar solo lo necesario.
- Almacenar solo lo que se puede consumir en una o dos semanas. Más, te resultará caro, no hay espacio y tendrás que limpiar más.
- Comprar alimentos de temporada. Céntrate en la dieta mediterránea y estudia el calendario de frutas y verduras; así comerás más sano, más rico y más barato.
- Aprovechar las sobras de comida en 24 horas. No se tira nada. Los niños aprenderán esta importante lección.
- Hacer la compra grande cada dos semanas y si puedes online para ahorrar tiempo, gasolina y esfuerzo.
- No cometer el error de ir a comprar productos frescos a diario, cuando en la nevera te duran de tres a cuatro días. Optimiza tiempo. Priorizarás mejor.
- Comprar en Rebajas y si quieres ser solidario, comunica a tus amigos las gangas que has encontrado para que también se sumen al ahorro. Te lo agradecerán.
- Los hermanos hemos heredado toda la vida y los primos también.
- Control energético y selección de la franja horaria más económica para el consumo.
- Pensar antes de hacer un gasto si está incluido en el presupuesto anual. Si no lo está y es imprescindible, entonces reajusta otras partidas para nivelar.
- El supermercado no es un museo; no entres si no lo necesitas; saldrás con algo, seguro.
- No comprar por impulso, aunque sea 1 €. El día que no le des importancia a 1 €, estás perdido.
- Es mejor comprar comparando precios y calidades.
- Selecciona muy bien a tus proveedores. Pregunta y agenda con datos asequible y actualizada.
Puedes añadir y compartir por IG tus sugerencias. Cuesta de septiembre superada.
Empieza el curso escolar con mi «Manual para Organizar tu Casa». Te aportará soluciones prácticas y sencillas de ahorro. Encontrarás más ideas ¡Ah! y cualquier cosa que necesites ya sabes que me la puedes preguntar. Me encontrarás en info@piaorganiza.es

Te recomiendo que te hagas un plan semanal para organizar tu casa. Mi libro el «Manual para organizar tu casa» será tu guía. En septiembre empezarás la organización y el orden con ventaja.
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Septiembre es el mes en el que los más pequeños, y no tanto, vuelven al colegio, necesitando nuevas libretas, libros, lápices, bolígrafos… La cantidad de material que necesitan cada año supone un esfuerzo económico grande para muchos de los padres de este país. Para reducir el gastos, además de los buenos consejos de este post, otros buenos ejemplos pueden ser el comprar productos de calidad, con el conocimiento de que, para el próximo curso, este se podrá aprovechar aun más.
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