La ONG se dedica a ayudar a los niños y jóvenes en situación de vulnerabilidad
La ONG Aldeas Infantiles SOS ha sido galardonada hoy en Oviedo con el Premio Princesa de Asturias de la Concordia 2016 por su contribución, durante más de setenta años y en 134 países, a la protección de los niños.
El acta del jurado, que ha estado presidido por el presidente del Principado, Javier Fernández, ha resaltado además que los «principios pioneros» de esta organización «cobran aún mayor vigencia en momentos en los que los conflictos internacionales ponen en especial riesgo a los más vulnerables».
Fundada en 1949, tras la II Guerra Mundial, por Hermann Gmeiner, que creó la primera Aldea en Imst (Austria), esta ONG cuenta actualmente con más de 570 aldeas infantiles atendiendo a más de 58.880 niños, y más de 1.880 centros -residencias de jóvenes, colegios y hospitales, entre otros- y programas desarrollados por la organización, que atienden a más de 490.000 niños, jóvenes y adultos.
El fundador, Hermann Gmeiner, «se dio cuenta que los niños no podían vivir en grandes orfanatos sino en una familia» y crearon «familias SOS», en las que normalmente una viuda de guerra vivía ejerciendo de madre con niños.

aldeas Infantiles
«Esa idea tan sencilla en una casa se multiplicó por todo el mundo» y ahora en 134 países se trabaja con «los menores que han perdido cuidados parentales y con otros niños, jóvenes y familias en situación de riesgo, para apoyarles y que sigan viviendo con su familia».
En Siria, por ejemplo, Puig ha resaltado que en la actualidad 40 profesionales y 80 voluntarios trabajan en un programa de emergencia, que en la ciudad de Alepo hay dos aldeas infantiles, y hay presencia de esta ONG en la «ruta de la emigración» en Grecia, Italia o Macedonia.