¿Qué es y para qué sirve una fouta?
Diseñadas originalmente para cubrir y secar el cuerpo durante el hammam –baño turco–, las foutas han conquistado occidente gracias a su extraordinaria polivalencia. Y es que estas peculiares toallas de grandes dimensiones y gran absorción pueden utilizarse tanto en el interior como en el exterior de casa. Por ejemplo, el caso de la foto de arriba:
Para un día de piscineo o playita como pareo, toalla o protector de sombrilla.
También puedes hacerte una ‘autosombrilla’ ¿cómo?: ponte la fouta directamente sobre tu cabeza y a continuación te colocas la pamela de ala ancha o tu sombrero panameño. Siéntate en tu silla playera y acuérdate de sacar por fuera la tela. Si hace viento puedes asegurar las esquinas con tus chanclas. Eso sí, no pierdas tu estilo!
También para decorar una pared ‘sin fundamento’ o si quieres tapar algún cuadro o arañazo o…, mira qué bien resuelto está en esta foto:
Un sweet–consejo: plánchalo antes y asegúralo arriba con una barra de madera o algo que encuentres por casa y que puedas colgar con dos cáncamos. La tela puedes graparla o usar cinta belcro autoadhesiva doble cara. La silla que ves es la BKF del arquitecto Bonet.

encontradas en westwing
En este link puedes ver sus más usos: usos de la fouta