
Realmente puedes usar cualquier libro. Las hojas puedes meterlas en la bañera con agua fría y té caliente durante un par de horas. Debes controlar la tintada. Ponlas a secar asegurándote de que queden rectas, aunque no te preocupes en exceso porque luego al pegarlas unas a otras cogen rigidez. Puedes hacerlo directamente sobre una tabla de 5 mm de grosor o bien un foam. Tu eliges. El toque de los marcos no tiene desperdicio. pinta los que no quieras o vayas a tirar.
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